Los Vikings 5 nos recibieron en su Club Vikingo (Coquimbo), para conversar sobre su historia, su música y entregarnos su particular mirada sobre el desarrollo de la cumbia en Chile. En una cita tiesa pero cumbianchera, tuvimos además el privilegio de estar en su concierto como invitadas de honor, y recorrer con ellos algunos de los clásicos de su repertorio, tales como De Coquimbo Soy, Tus Besos Son y El Minero.
Conversamos con Edson Núñez (co-director y bajista) y Franco Cortés (tecladista), quienes son parte de la generación de recambio de los Vikings 5. Algunos de los momentos más sabrosos de la entrevista, es lo que compartimos con ustedes en este espacio.
A falta de trompetas… ¡buenas son las guitarras!
Inspirados en Los Fénix de Calama, los hermanos Juan y Chagua Núñez le dan vida a Los Vikings 5 a finales de los años 60` en el puerto de Coquimbo. Provenientes de familias obreras vinculadas al salitre, no contaban con los medios para conseguir los instrumentos de bronce que usaban las sonoras de la época. Sin embargo, esta carencia se transformaría en la excusa para crear su propio estilo:
“(…) nosotros no teníamos como para comprar trompetas ni nada, sino que guitarras no más y ahí empiezan a crear el grupo. Después hay un hito muy importante que es que traen guitarras eléctricas y viajan al norte y de allá traen una cámara de eco, que era un efecto, que era como la novedad, un efecto para la guitarra y de ahí viene el sonido que es el estilo de Los Vikings, se compró al azar, y como son norteros, crearon sus canciones y ahí viene todo el fenómeno Vikings 5”.
La trayectoria musical de los Vikings 5 comienza en su puerto natal, tocando en distintos restaurantes como La Martafala y Las Totoras, pero pronto logran llegar a la Carpa Grande de La Pampilla, un gran salto en su carrera, ya que pudieron ser escuchados masivamente y codearse con otras agrupaciones importantes del mundo de la cumbia en Chile, como la Sonora Palacios, que venía de Santiago.Paralelamente, comienzan a sonar en la radio, proceso en el cual sería fundamental la apuesta de Radio Riquelme, pues en ella grabaron su primer demo para ser llevado a Santiago, y luego grabado de manera profesional en la capital. Con orgullo, nos cuentan además haber sido los primeros cumbiancheros en grabar con el sello EMI Odeón.
Repertorio con sabor a Viking
Dentro de las primeras grabaciones profesionales de Los Vikings 5 están “Linda Provinciana” y “Papá en tu día”. Luego se edita “Que linda está tu hermana” y “El minero”, una de sus canciones más de mayor reconocimiento hasta nuestros días.
“El minero” la compuso en 1977 Guillermo Montero, quien fue guitarrista de Los Vikings y que también trabajaba en la minería. Esta canción retrata la cruda realidad del trabajo en la minería del norte de Chile, principal actividad económica del país. Como minero, Diego tuvo en su propia vivencia la inspiración necesaria para componer uno de los grandes éxitos de los Vikings, pero su oficio también fue la causa de su retiro de la agrupación, por la incompatibilidad de su trabajo con la música.
Otra de las canciones importantes de Los Vikings es “Un año más” del músico coquimbano Hernán Gallardo, quien se la dio a conocer a Los Vikings para que la hicieran cumbia:
“Fue el primer grupo que la grabó como cumbia en EMI Odeón (…) Y ese año [1977] tocan en La Pampilla, comparten escenario con la Sonora Palacios, y ahí la escuchó la Sonora Palacios por Los Vikings 5 y la grabaron en Santiago también dos años después. Obviamente el fenómeno fue por ellos, por ellos fue el éxito nacional, pero el mérito de Los Vikings es que la sacaron del anonimato, si no, no existe.”
Algo similar ocurrió con «Candombe para José», compuesta por el argentino Chato Ternavasio en Uruguay, grabada por Illapu en ritmo de candombe, y cumbianchada por Los Vikings:
“[Illapu] la graba primero, pero Los Vikings 5 la hicieron cumbia y obviamente la cumbia tiene más cercanía con el pueblo (…) Y esos fueron los primeros cinco discos de plata, 20 mil copias vendieron con ‘El Negro José’, fue un éxito pero muy grande que nos llevó a una gira por Argentina, el año ‘78. El primer éxito de Los Vikings 5 con el ‘Negro José’”.
Gracias a este éxito se abren distintas puertas para la cumbia coquimbana, especialmente las de la televisión, que invitan a grupos como Los Vikings 5 para amenizar su programación miscelánea. A finales de los 70` fueron invitados a programas como Sábados Gigantes y…
“A Dingolondango en año 77 a raíz del ‘Negro José’. Es que en ese tiempo la cumbia no era como es ahora, como tocan Américo, tiene mucha difusión, no po’, ahí la cumbia era como rasquita, no tenía mucha influencia, era pa’ puro bailar, no la escuchaban.”
De Coquimbo soy: identidad local
Coquimbanos de corazón, conscientes de la marginación a la que en este país están expuestas las agrupaciones de regiones (en términos de promoción y difusión de su trabajo), nunca han querido radicarse en otro lugar que no se su tierra natal. Sus éxitos han recorrido diversos países del globo, aunque no siempre han sido ellos quienes se lleven los créditos de su popularización:
“Es que siempre Los Vikings han grabado primero los temas y después en Santiago los graban otros grupos, ha ocurrido con ‘El Negro José’, con ‘Un año más’, con…. ‘Qué buena está tu hermana’, muchas canciones, ‘Se va la vida’, ‘Tus besos son’, las han grabado Los Vikings y pegaron allá bien populares con orquestas”.
Desde Coquimbo han emprendido el vuelo a otros rumbos pero siempre con el compromiso de volver a su tierra. Aunque hasta el momento no se ha concretado su participación en uno de los escenarios más importantes de la música popular chilena, el Festival de Viña del Mar, están satisfechos porque han podido viajar por el mundo con su música: “Gracias a Dios que sin ir a Viña hemos recorrido todo lo que te hemos mencionado, de Arica a Punta Arenas, hemos estado en Isla de Pascua, en Australia, en muchas partes. Somos el grupo tropical de Chile que más ha recorrido el mundo. En serio.”
Embajadores de la cumbia chilena y de su particular estilo coquimbano por el globo, su vocación localista los llevó a adaptar la canción “De Colombia Soy” en una cumbia que es hoy himno infaltable de su repertorio y de los habitantes del puerto, “De Coquimbo soy”:
“Si nosotros no les tocamos el ‘De Coquimbo soy’ se enojan. Un año no lo tocamos, y nos criticaron… pero por qué no tocaron ‘De Coquimbo soy’, en serio. No, al tiro, es muy localista la gente. Además es como, nosotros decimos, es como el Himno Nacional de Coquimbo, la gente más se sabe por ejemplo, no se sabe el himno de Coquimbo propiamente tal, pero la gente se sabe ‘De Coquimbo soy”.
Pero esta identidad local no solo se expresa en sus canciones y letras, sino también en el propio nombre del grupo: Desde el siglo XVI, piratas, corsarios, bucaneros y filibusteros atravesaron los mares en busca de tesoros de conquista. Desde entonces, con el nombre de “vikingos” se llamó a corsarios y piratas ingleses y holandeses tales como Drake o Sharp. A finales de los 60`, había en la bahía de Coquimbo un barco encallado llamado El Viking 1, tanto tiempo varado, que se transformó en parte del paisaje del puerto. La identidad porteña y el hecho de que inicialmente la agrupación estaba conformada por 5 músicos terminó por dar nombre a una de las bandas más emblemáticas de la escena cumbianchera chilensis.
El puerto, la mina, historias de “vikingos”, la Pampilla, entre tantos otros elementos, van conformando así el crisol cultural local coquimbano, expresado en los Vinkings 5 como embajadores emblemáticos, quienes reconocen además su tierra como cuna y escenario de grandes hitos del desarrollo de la cumbia en Chile, capaz de hacer eco creativo de las influencias nortinas, trasandinas, capitalinas y propiamente locales. Así ellos confirman la relevancia del puerto de Coquimbo en el desarrollo cumbianchero chileno:
“Es importante Coquimbo, porque el fenómeno de Amerikan Sound, también partió aquí. Ellos eran de Iquique, aquí en La Pampilla gustaron, y de aquí, Adrián. Adrián y los Dados Negros, igual, todo un fenómeno, fue todo un motivo… yo los traje, y gustaron al tiro, y de aquí saltaron a La Pampilla. Y La Pampilla, es como un trampolín muy grande, hay mucha gente. Como que aquí la gente siente el pulso de los grupos buenos, ha ocurrido con Garras de Amor… como dicen aquí, Coquimbo es cuna de grandes músicos, se escucha mucha música…”
* Esta reseña fue escrita en base a la entrevista – taller que realizamos con Los Vikings 5 en la noche del 28 de agosto de 2010, en su “Club Vikingo”, Coquimbo, Chile.
Un cumbianchero en “Los Vikings 5”